Solamente aquel que construye el futuro tiene derecho a juzgar el pasado
Friedrich Nietzsche
Este domingo, Quintana Roo cumplirá 43 años de haber sido erigido como entidad federativa, en una coyuntura en la que ha quedado demostrado que su principal actividad, el turismo, sufre vaivenes, pero sigue siendo fuerte y un éxito a pesar de los gobiernos que ha tenido, además del agradecimiento de todos los que han hecho del estado su hogar, pues la población estatal se compone en más de la mitad por inmigrantes; acaso, el verdadero fallo en la entidad es su clase política, pues en menos de medio siglo de existencia, es una de las más endeudadas del país.
La conmemoración; sin embargo, se inscribe también en un entorno de renovada esperanza en la política, pues luego de gobiernos de pesadilla las finanzas estatales comienzan a estabilizarse y su futuro pudiera cambiar si se sabe administrar mesuradamente y se afina un gabinete estatal que, en alginas de sus áreas, ha dado muestras de no estar acorde a las exigencias del “cambio” prometido.
Es el segundo año que se festeja con un gobierno no encabezado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) –para el aniversario de 2016, Carlos Joaquín González ya había tomado protesta-; y aunque la elección fundamental será la de 2019, en que se renovará el Congreso local, la de 2018 representará la ratificación del triunfo en la gubernatura, con la elección de cuatro diputados federales, 3 senadores y once alcaldías; así que no será raro ver que desde este domingo el mandatario comience a “lanzar señales” sobre el rumbo que tomarán el proceso, no necesariamente sobre “ungidos” con candidaturas, pero sí sobre los alcaldes que deberán prepararse para la reelección.
El gobernador realizó esta semana su primera gira internacional con el objetivo de consolidar el turismo, sin la parafernalia acostumbrada por su antecesor, sin anuncios vanos; realizó reuniones de trabajo y las mismas estuvieron antecedidas por juntas locales con embajadores; no fue de turista pues, sus doce años de experiencia profesional en el tema le permiten hacer las cosas de manera diferente, ese es un cambio positivo, más acciones como estas hacen falta a esta entidad de apenas 43 años, ya se lo merecía, ojalá la clase política comience ahora a estar a la altura de las exigencias, porque ha quedado a deber.
Los tres Poderes del Estado han sido renovados en su titularidad, se ha construido una normatividad para sancionar los excesos del pasado y como basamento de un mejor futuro; la entidad aporta más del treinta por ciento del total de divisas que ingresan al país por concepto de turismo, el crecimiento estatal es en promedio de 4.6% y su generación de empleo va a la alza; pero muchos son los retos del futuro y muchos los compromisos que deben cumplirse, el segundo año está en marcha, la palabra la tienen ellos; así se observa desde aquí, A Tiro de Piedra, nos leemos en la próxima.